Hoy quiero compartirles algunas de mis notas en cuanto ha lo
que he leído del verdadero evangelismo bíblico, es sorprendente la falta de
preparación en las iglesias cristianas al respecto, todo se limita a un día a
salir y repartir folletitos (que no esta mal) pero no se tiene una forma clara
de como hacer la obra evangelistica efectivamente siguiendo los principios
biblicos, por lo tanto los nuevos convertidos desertan después de algún tiempo,
en las iglesias tenemos falsos cristianos, apostatas de la fe porque realmente
nunca se convirtieron. Veamos lo siguiente:
¿Se ha preguntado alguna vez por qué el pecador no se
conmueve cuando se le narra la historia del Calvario?
Su mente divaga, y casi
bosteza mientras usted le explica que el Hijo de Dios derramó su sangre para
pagar la deuda que nosotros teníamos que pagar por nuestros pecados. El pecador
piensa: "¿Y qué?" No se conmueve hasta derramar lágrimas, como el
santo que reconoce la profundidad de su maldad y el tremendo perdón que Dios le
ha garantizado.
¿Comprende usted plenamente cuál es la función de la ley de
Dios para la humanidad? ¿Qué dice la palabra de Dios con respecto al uso de la
ley en la predicación del evangelio?
1. La ley nos señala nuestra culpa delante de Dios e impide
que nos justifiquemos a nosotros mismos.
Pero sabemos que todo lo que la ley dice, lo dice a los que
están bajo la ley, para que toda boca se cierre y todo el mundo quede bajo
juicio de Dios (Romanos 3:19).
2. La ley produce en nosotros el conocimiento del pecado.
Ya que por las obras de la ley ningún ser humano será
justificado delante de él; porque por medio de la ley es el conocimiento del
pecado (Romanos 3:20).
3. La ley define el pecado. ¡El apóstol Pablo ni siquiera
sabía lo que era el pecado hasta que la ley se lo dijo!
¿Qué diremos, pues? ¿La ley es pecado? En ninguna manera.
Pero yo no conocí el pecado sino por la ley; porque tampoco conociera la
codicia, si la ley no dijera: No codiciarás (Romanos 7:7).
4. La ley fue diseñada precisamente con el propósito de traer
a los hombres y las mujeres a Cristo.
De manera que la ley ha sido nuestro ayo, para llevarnos a
Cristo, a fin de que fuésemos justificados por la fe (Gálatas 3:24)
Así como la ley dejó al corredor impotente ante el juez, sin
medios para pagar la multa ni palabras para justificarse, así la ley de Dios
deja al pecador sin medios para pagar su deuda de pecado delante del juez del
universo.
Ninguno de ellos podrá en manera alguna redimir al hermano,
ni dar a Dios su rescate (porque la redención de su vida es de gran precio . .
.) (Salmo 49:7,8).
5. La ley no ayuda a nadie, sino que nos deja impotentes delante
de Dios.
Juan Wesley decía: "Antes de predicar acerca del amor,
la misericordia y la gracia, tengo que predicar sobre el pecado, la ley y el
juicio." A un joven amigo que con frecuencia le pedía consejos, le
escribió: "Predica el noventa por ciento acerca de la ley, y el diez por
ciento acerca de la gracia."
Veamos la manera como Carlos Spurgeon, el "Príncipe de
Los Predicadores", usó la ley de Dios para producir convencimiento:
Pero es más, hay guerra entre ti y la ley de Dios. Los Diez
Mandamientos están contra ti. Los primeros cuatro salen y dicen: "Sea
maldito porque él me niega. Tiene otro dios además de Mí. Su dios es su
estómago; rinde homenaje a su propia sensualidad." Todos los Diez
Mandamientos, como diez cañones, están apuntados contra ti hoy, porque has
quebrantado todos los estatutos de Dios y diariamente has descuidado todas sus
demandas divinas. Alma, te será difícil levantarte en guerra contra la ley.. .
. ¿Qué harás cuando la ley se presente con sus terrores, cuando la trompeta del
arcángel te levante de la tumba, cuando los ojos de Dios penetren ardientemente
en tu alma culpable, cuando los grandes libros se abran, y tus pecados y
vergüenza reciban el castigo?
¿Puede usted imaginar la desesperación que surge en el
corazón de un pecador culpable, cuando oye tan horribles palabras? sólo cuando
comprenda su depravación delante del santo Creador, y la severidad del juicio
de Dios, la cruz tendrá significado para él! Sólo entonces clamará con
desesperación: "¡Ay de mí! que soy muerto." Sólo entonces se golpeará
el pecho y dirá: "¡Dios sé propicio a mí, pecador." Cuanto más comprenda
su culpa, tanto mejor.
La Biblia dice: "Todo aquel que invocare el hombre del
Señor, será salvo" (Romanos 10:13). Cuando un hombre se está ahogando, no
susurra, sino que grita con toda la fuerza. Si no comprende que se está
ahogando, ni siquiera llamará. Del mismo modo, sólo los que entienden que se
están ahogando en sus pecados clamarán: "Dios, sé propicio a mí,
pecador."
Spurgeon dijo: "¡Los pecadores tienen que ser Inmolados
por la ley, para que puedan ser resucitados mediante el evangelio!"
Observemos las siguientes citas relevantes del libro
Conferencias sobre avivamiento, por el gran predicador Carlos Finney. Tenga en
mente que el ministerio de Finney produjo un 80 por ciento de convertidos que
permanecieron fieles.
Es de gran Importancia que al pecador se le haga sentir su
culpa, y no se le deje la impresión de que es infortunado. No tenga temor.
Muéstrele la amplitud de la ley divina, y lo estricto de sus preceptos.
Indíquele que la ley condena sus pensamientos y su vida. Cuando hablo de un
pecador convencido, me refiero a uno que se siente condenado por la ley de
Dios, como un pecador.
Fuente: "Lo que el diablo no quiere que sepas" - Ray Comfort
Fuente: "Lo que el diablo no quiere que sepas" - Ray Comfort
Bueno, esto es solo una parte de lo que menciona el libro,
cuando lo leí por primera vez quede impactado ante la verdad que estaban a mis
ojos y no lo había podido entender antes, la biblia es muy clara... nosotros
somos los que no tenemos claridad por nuestra negligencia del conocimiento de
las escrituras. Espero les ayude y estaré subiendo más material y escribiendo mi
propio material. bendiciones
Les dejo nuestra página de Evangelismo donde subo artículos y
material: id.evangelismo